viernes, 29 de enero de 2016

Se encarencen precios de alimentos básicos en Palavecino

Neveras de carne y pollo vacías, producto de la aguda escasez en Palavecino
Incomprables se encuentran frutas y hortalizas

Una nueva alza en los precios de los alimentos deja por sentado que el sueldo mínimo quedó pulverizado amén de la escasez que se aprecia en abastos y supermercados.

Comprar alimentos se ha convertido en una pesadilla para los venezolanos y en el caso de los residentes del municipio Palavecino, hacer largas colas para conseguir dos o tres rubros regulados, ya es una constante.

El azúcar desapareció de los anaqueles y para conseguirla con los ‘bachaqueros’, se debe disponer de al menos 200 bolívares por cada kilogramo.

Precios por las nubes

En lo referente a los rubros como harina de maíz, pasta y arroz, también aumentaron su valor, los cuales para evadir la barrera de la regulación, se fabrican con algún elemento o aditivo, llegando a costar: la harina Bs 135, la pasta Bs 346 la de 500 gramos y la instantánea (cinco minutos) Bs 277, y el arroz Bs 185.

La lata de atún de 184 gramos, apareció marcada en Bs 943 con cuatro céntimos; la bolsa de leche en polvo (que no se consigue) en Bs 2.150; la bebida achocolatada Toddy de 400 gramos, en Bs 905; la bolsa de Cerelac de 900 gramos en Bs 1.784 y la lata de jamón endiablado de 115 gramos Bs 450.

Pasta, harina y azúcar aumentaron su valor
Igualmente el tomate se ubicó en Bs 753 por cada kilogramo; la cebolla en Bs 920; la lechuga romana en 511 y la papa en 427; el ajo superó los 2.000 y las frutas “están por las nubes”, según coinciden los encuestados.

En los supermercados, franquicias y abastos de jurisdicción palavecinense, las neveras de carne y pollo, lucen vacías, lo que demuestra la aguda escasez existente, aunque en frigoríficos y carnicerías, el kilogramo de pollo tiene un valor de 920 y la carne de primera 2.050.

Texto y fotos:
@LuisPerozoPadua 

En Palavecino común ver en abastos y supermercados como se llenan anaqueles con productos repetidos para disfrazar la escasez 
   

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