La beatificación se realizó en el estadio Universitario de Caracas y fue liderada por el cardenal Ángelo Amato, prefecto de la Congregación para la Causa de los Santos |
Este sábado la madre
Carmen Rendiles fue proclamada como beata por el Vaticano, convirtiéndose en la
tercera devota venezolana beatificada junto a la madre María de San José y la
madre Candelaria de San José.
El acto celebrado en el estadio
Universitario de Caracas y liderado por el cardenal Angelo Amato, prefecto de
la Congregación para la Causa de los Santos y en representación del papa
Francisco, fue el encargado de la declaración de la Madre Carmen, luego de
recibir de manos del cardenal Jorge Urosa Savino, la petición formal de
beatificación –como parte del protocolo religioso– en un acto solemne, esperado
con fervor por devotos católicos y miembros de la Congregación de las Siervas
de Jesús de Venezuela, reseñó AVN.
"Decretamos que la venerable
sierva de Dios, María del Morten Carmelo Virgen, en el mundo llamada Carmen
Elena Rendiles Martínez, fundadora de las Hermanas Siervas de Jesús, quien
siguiendo plenamente la voluntad divina, vivió con fidelidad ejemplar la
consagración religiosa, sirviendo a los miembros de su comunidad y a los
sacerdotes. A partir de ahora en adelante será proclamada con el nombre de
beata", reza parte de la carta de las Letras Apostólicas, leída por el
enviado del Vaticano, Amato.
El documento religioso firmado por el
papa Francisco, indica que cada 9 de mayo se celebrará en honor a su memoria,
por ser el día en el que fue glorificada en el cielo.
La carta que certifica la
beatificación de la Madre María del Carmen Rendiles fue entregada por el cardenal Amato a
la superiora de los Siervos de Jesús, hermana María Eugenia Noreña y a la
vicepostuladora de la causa, hermana Rosa María Río.
"La Madre Carmen fue hasta el
final una mujer fiel a su consagración religiosa. Se mantuvo fiel en el
propósito de ser santa. Su fe era profunda, íntegra, autentica y madura",
expresó el enviado por el Santísimo Padre, durante la misa en su honor.
En la ceremonia oficiada, el cardenal
Ángelo Amato, estuvo acompañado de los cardenales, obispos, arzobispos,
sacerdotes y diáconos de la Iglesia católica.
El milagro
Según el testimonio presentado a la
comisión investigadora que llevaba la causa de la Madre Carmen, en mayo del año
2003, la doctora cirujana Trinette Duran de Branger se encontraba practicando
una operación en el Hospital Miguel Pérez Carreño de Caracas.
Durante la cirugía, un cable sin
protección se desprendió de la mesa quirúrgica, alcanzando el brazo de la
galena, lo que le ocasionó una fuerte descarga eléctrica que quemó su guante y
afectó tres dedos de su mano.
A partir de ese momento la doctora
Branger padeció de fuertes e incesantes dolores y una posterior inmovilidad en
el miembro y los dedos. Luego de más de dos decenas de visitas a diversos
facultativos, sin encontrar solución a la afección, se le recomendó a Branger
practicarse una operación para mejorar su calidad de vida.
Previo a la cirugía, que estaba
pautada para el 18 de julio de ese mismo año, la paciente decidió acercarse a
la capilla del Colegio Belén que atienden las Hermanas de la Congregación
Siervas de Jesús, y lugar en el que yacen los restos de la Madre Carmen, para
orar por la sanación de su brazo.
Una vez allí, la religiosa María San
Luis, hermana de sangre de Madre Carmen, se acercó a Branger y le preguntó la
razón de su visita y luego la invitó a una habitación, en la cual Madre Carmen
descansaba en vida.
El testimonio de Branger cuenta que
en esa sala observó un cuadro de la religiosa del cual repentinamente surgió un
rayo de luz que entró por su cabeza y recorrió su brazo, hecho que le ocasionó
la pérdida del conocimiento por unos instantes.
Al despertar el brazo había sido
completamente sanado, al punto que dejó de utilizar inmediatamente la férula y
no tuvo que practicarse la cirugía pautada.
Fue el relato de la doctora y de sus
médicos tratantes con los que se logró que el 19 de diciembre de ese mismo año,
el papa Juan Pablo II anunciara la beatificación de la religiosa, quien desde
el 9 de marzo de 1995 inició el proceso de canonización que fue reconocido en
el año 2013, cuando el máximo representante de la Iglesia católica le otorgara
el título de Venerable por sus "virtudes heroicas".
Beata de Venezuela
Carmen Elena Rendiles Martínez nació
en Caracas el 11 de agosto de 1903. Fue criada en un hogar de profundas raíces
y prácticas cristianas.
Llevó una vida de total entrega a su
trabajo religioso, siguiendo al pie de la letra los votos que hizo al ordenarse
como religiosa. Y fue una líder para las hermanas a su cargo.
Rendiles falleció el 9 de mayo de
1977 a causa de una gripe. Sus restos fueron sepultados en la iglesia del
Colegio Belén donde también se levantó para ella un pequeño museo que guarda y
exhibe sus pertenencias.
0 comentarios:
Publicar un comentario